Os traigo un helado de café con trocitos de chocolate sin heladera que queda de lo más aparente y rico.
Ingredientes:
(no tengo ni idea de cuanto sale por que me lo he empezado a comer antes de fijarme, supongo que de 10 a 15 bolas grandes o más)
- 300 ml. de nata para montar bien fría
- 100 ml. de leche condensada
- 1 y 1/2 cda. de café instantáneo
- 1 cda. de agua o licor (yo utilicé amaretto)
- 2 cdas. de azúcar
- 1 cdta. de vainilla en pasta
- Al gusto chocolate troceado
Preparación:
En el agua o el licor diluimos el café hasta que no quede ningún grumito. Añadimos la vainilla y mezclamos bien. Aparte, en el bol de la batidora o en el que vayamos a batir ponemos la leche condensada con el azúcar y a esto añadimos la mezcla de café. Batimos con una batidora de varillas o un brazo ultrasónico. Cuando esté mezclado añadimos la nata y batimos hasta formar picos firmes. Por último incorporamos el chocolate y mezclamos ligeramente para que se reparta. Ponemos en un recipiente y lo llevamos al congelador.
Al pasar una hora lo movemos para que no se cristalice y ya lo dejamos 3 o 4 horas hasta que coja la consistencia deseada.
¡A comer!
Lo cierto es que no me gusta demasiado el dulce, pero sí tengo ciertos problemas con los helados y la mermelada, es algo superior a mí... Por eso no podía dejar de intentar hacer helado casero. La verdad es que queda un helado muy muy aparente y que es ideal para tomarlo después de comer a modo de café.
Tengo que reconocer que quizá la próxima vez le añadiré un poquito menos de licor ya que a mi no me gusta demasiado el toque de licor en los postres pero tiene gracia el sabor a amaretto en el fondo. si tenéis licor de café supongo que quedará genial.
Si lo probáis tenéis que contarme que tal os ha ido! Os lo recomiendo con mucho mucho mucho chocolate ya que le da un contraste dulce muy bueno con el amargo del café.
Espero que os haya gustado mi vuelta! Voy directa al congelador a por más helado :)
Besos dulces!