Cuando se acercaba la fecha le dije ''vas a tener el honor de elegir qué postre quieres que haga'' y él me dijo ''una sencilla tarta de queso''. ¿Una sencilla tarta de queso?¿De verdad? Así que ha pesar de tener la ilusión de hacer una maravillosa red velvet o unos cupcakes bien rosas fui a buscar los ingredientes para una clásica y riquísima tarta de queso, de esas que se hacen con los ojos cerrados.
Ingredientes
- 1 Paquete de galletas María (podemos usar las que tengamos por casa pero con estas sale muy rica)
- 50 gr. de mantequilla.
- 350 gr. de nata
- 350 gr. de queso de untar
- 50 gr. de azúcar
- 7 gr. de gelatina de limón
- Mermelada de fresa para cubrir
- Fresas para decorar
Preparación
Lo primero será hacer la base de la tarta, esa deliciosa base de galleta con mantequilla. Picamos las galletas lo máximo posible hasta hacerlas casi polvo. Podemos hacerlo en un picador o meterlas en una bolsa de plástico y pasar un rodillo por encima. Una vez picadas incorporamos la mantequilla a temperatura ambiente y con las manos amasamos hasta formar una pasta. En un molde desmontable extendemos por el fondo la mezcla de galleta y mantequilla hasta que se cubra bien y tenga mas o menos el mismo grosor.
Por otra parte en un cazo pondremos a hervir la nata junto al queso de untar, el azúcar y la gelatina. Empezará a espesar y cuando hierva la apartaremos del fuego. Fuera de éste la colamos y la vertemos en el molde con cuidado de no romper la base de galleta.
La pondremos en la nevera un mínimo de 6 horas. Lo ideal es hacerlo de un día para otro. La desmoldamos y ponemos la mermelada y las fresas para decorar.
*Es aconsejable no poner mucha mermelada por que la tarta ya es dulce de por sí.
*Si la mermelada es muy espesa podemos aligerarla con un poco de agua.
La textura de esta tarta es bastante cremosa así que no os asustéis si no se cuaja, por que es así. Si os gusta más consistente podéis añadirle más gelatina.
Espero que os guste.
Besos de fresa,
Ángela